En la reciente conferencia de Copenhague sobre cambio climático hubo también espacio para la discusión sobre la participación e influencia de los edificios en la emisión de dióxido de carbono a la atmósfera y el consecuente efecto invernadero.

Según las Naciones Unidas, el 48% del dióxido de carbono es producido por los edificios. Teniendo en cuenta que las fachadas de los edificios son la principal llave de la solución de este problema, ya que abarcan los aspectos de aislación térmica y captación de energía solar, es que la empresa Hydro Building Systems brinda soluciones en sistemas de fachadas a través de su marca Technal que se están implementando en el mundo y en Argentina para desarrollar una arquitectura sustentable.

Los edificios emiten el 48% del total de dióxido de carbono, según cifras del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (UNEP, por sus siglas en inglés). Cifras como esta fueron debatidas en la última conferencia sobre cambio climático, que se organizó en Copenhague.

Además, el transporte emite menos del 27% y la industria completa casi el 25%. Del total emitido por los edificios, en promedio, el 85% se produce durante la fase operacional, es decir, debido a transferencias térmicas por el uso de climatizadores. El restante 15% es consumido durante la fase de construcción edilicia.

La injerencia de los edificios en la emisión de dióxido de carbono, principal gas que produce el efecto invernadero y el calentamiento global, es altísima, y deja en claro que una de las llaves fundamentales para la solución de este acuciante problema mundial está en la arquitectura, y en especial en las fachadas, que deben impedir la transferencia de energía.

Es por ello que Hydro Building Systems, empresa del grupo noruego Norsk Hydro, con sede en Toulouse, Francia, está desarrollando sus sistemas de fachadas Technal, que ofrecen al mercado productos en carpintería de aluminio que ayudan a mejorar la performance energética de los edificios respetando el medio ambiente.

La empresa desembarcó recientemente en Argentina y su Gerente de Área, Fabián Álvarez, explica: "Es curioso como no sólo en Argentina, sino a nivel mundial, los profesionales de la construcción sobreestiman los costos que implica proyectar un edificio sustentable, y que es en la realidad de un promedio del 5%, y subestiman la importancia que los edificios tienen en el problema del calentamiento global".

"Es necesario implementar cambios en la industria de la construcción, y para eso Technal tiene una gama de productos destinada a proteger el mundo en que vivimos", explica Álvarez. Los sistemas de fachadas de la línea MX brindan una performance uniforme térmica y acústica en toda la superficie.

El Gerente de Área de Hydro Building Systems explica: "Si se instala un doble vidrio, parte de su atenuación respecto del exterior se pierde por la fachada de aluminio, que es naturalmente transmisora. Pero en el caso de la fachada MX no existe esa trasmisión porque el perímetro incluye ruptura de puente térmico y permite la uniformidad de la aislación".

Por otro lado, durante 2010 Hydro Building Systems lanzará en Argentina un nuevo producto de la línea MX de Technal, el MXSSG, especialmente preparado para lograr una alta performance térmica y acústica, gracias a que emplea un sistema de anclaje de vidrios mediante una U de aluminio, que se coloca en la cámara DVH. Además, la firma comenzará a utilizar pinturas en polvo para recubrir los perfiles, con lo que logran bajar la emisividad de dióxido de carbono a la atmósfera.

En Argentina no existe una plataforma que fomente los green buildings porque, como explica Fabián Álvarez, se necesita una base sustentable de diseño y apoyo del gobierno al sector privado. Sin embargo, sí hay edificios con fachada con muro cortina con rotura de puente térmico, que evitan las pérdidas de energía. Para las soluciones más complejas, que incluyen celdas fotovoltaicas en fachadas, parasoles y vidriados, el país todavía no está habituado. Sin embargo, las construcciones que utilizan Technal en sus fachadas están preparadas para el futuro.

Por ejemplo en el complejo de oficinas Altercity, en Tucumán, algunas secciones de la fachada que hoy están recubiertas con aluminio se podrían intercambiar por perfiles con celdas fotovoltaicas. El costo de ese cambio es mínimo, y "sin mayor esfuerzo la construcción comienza a autoabastecerse de energía", explica Álvarez. La situación es similar en el edificio Dique IV, donde los parasoles metálicos se podrían reemplazar por colectores, y donde también se podrían agregar vidrios con paneles fotovoltaicos.

"Hydro invierte muy fuerte en el aprovechamiento de la energía solar y, aliado con la empresa Solaris System, produce parasoles y vidriados con celdas fotovoltaicas y equipos de baterías, además de las fachadas que evitan la transferencia de energía. El caso más impactante de ahorro energético a nivel mundial es el edificio Neue Monte Rosa Hütte, en Suiza, que genera el 90% de la energía que utiliza. Es un gran aporte, no sólo a los usuarios del edificio sino como un ejemplo para el planeta", concluye Fabián Álvarez.