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Información
César
Merlonghi, María Belén Moyano,
Matías Rovira y Julieta Velázquez,
integrantes del equipo ganador, son
alumnos de la Facultad de Arquitectura, Planeamiento
y Diseño de Rosario (Santa
Fe, Argentina).
Recientemente obtuvieron el
primer premio en las categorías Diseño
Urbano y Paisajístico y Diseño
Arquitectónico para estudiantes
del Concurso Internacional Galapagos-Franja
0: Urbanismo y Arquitectura Sostenibles,
organizado en el marco de la XV Bienal
de Arquitectura de Quito.
Los proyectos
ganadores en las categorías mencionadas,
denominados Urbanismo
a la carta y Vivienda a la carta, respectivamente fueron
desarrollados como un proyecto globalizador que abarcara ambas temáticas.
La
participación en el concurso
fue propuesta por los docentes de la materia Proyecto
Arquitectónico III, cátedra Arq.
Anibal Moliné, como trabajo final de la
materia y de la carrera.
Contacto
mati007@hotmail.com (Matías
Rovira)
Más
información
Para más información sobre el concurso y los proyectos premiados
visitar http://www.baq2006.com/internacional.aspx
Veredicto
del concurso
Para acceder al veredicto
del concurso realice click
aquí |
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Urbanismo a la carta
Este final de siglo ha dejado flotando en el aire la inquietante
pregunta sobre el porvenir de la arquitectura. La indeterminación
e incertidumbre ha dado lugar al nacimiento de una disciplina
más libre que ya no se limita a situaciones simplificadas
o idealizadas sino que se ha instalado frente a la complejidad
del mundo real, una arquitectura que nos permite expresar
la creatividad humana como uno de los rasgos fundamentales
y singulares de la naturaleza.
Frente a esta situación la propuesta plantea una
estructura inesperada donde la única ley de formación
es la relación en constante transformación
entre lo que existe y lo que quiere existir.
La propuesta explora el carácter que debe tener
un asentamiento urbano en un paisaje tan preservado como
el que actualmente existe en Puerto Baquerizo Moreno. Conservar
la presencia del paisaje implica tratar de pensar en un
modelo de asentamiento que muestre la memoria histórica
natural del sitio.
La definición de la propuesta trata de establecer
una reglas de juego, que permitan que en realidad no sea
importante la posición exacta de las cosas, ni siquiera
las tipologías arquitectónicas empleadas:
estas pueden variar radicalmente, o irse ajustando con
el tiempo, sin que por ello cambie el carácter de
la actuación. Por el contrario la actuación
quedaría enriquecida sin duda con la variedad.
Sólo
los conceptos deberían permanecer, ya que lo atractivo
de la arquitectura es la capacidad que tiene una idea -cuando
está vinculada a conceptos y no a formas- de adquirir
diversas formalizaciones. Un pensamiento urbanístico,
o arquitectónico
es, ante todo, el modo en que viene expresado.
Así se propone una serie de bloques genéricos
que tratan de combinar los espacios exteriores con los
espacios interiores "urbanos" donde tiene lugar
la sociabilidad propia del hombre. Un sistema que ofrece
una serie de leyes que le permiten crecer amoldándose
a las circunstancias y que, por lo tanto, posee
gran flexibilidad, pero que a la vez se estructura de un
modo ordenado y eficaz.
Esta libertad de acción hace más difícil,
pero también más noble, el trabajo de dibujar
el lugar donde el habitar, el ocio, y el trabajo, la ciudad
y la naturaleza desdibujan sus fronteras.
En síntesis, la propuesta nace de pensar
la dinámica
de la ciudad de Puerto Baquerizo Moreno como un fluido
que desciende por el territorio, similar al de la lava
del volcán, y se va adaptando a la topografía
del lugar, dejando rastros, "bolsas" que
luego formarán parte de ciertos usos y actividades
de gran necesidad para la ciudad.
A partir de estas líneas de fluidos se definen
vías de circulación que conectan la ciudad
longitudinalmente. A su vez, éstas vías,
definen zonas de diferentes usos de suelo, con
diferentes grados de ocupación del mismo, que va disminuyendo
a medida que se acerca a los límites de la ciudad,
de modo de lograr una transición, un fuelle, con
el Parque Nacional Galápagos.
Por otro lado, al tener la ciudad una pendiente descendiente
hacia el mar, se pensó en atravesar la ciudad
con una vía vehicular, que sigue la lógica
de ascenso a una montaña, ladera, o bien un terreno
con pendiente. Esta vía no sólo sirve para atravesar
la ciudad, sino que la conecta en todos los sentidos
y le otorga una dinámica especial.
Vivienda a la carta
La multiplicidad de posibilidades, carácteres
y gustos del individuo contemporáneo, hacen de
sus viviendas un lugar variable y heterogéneo.
Desde esta perspectiva nuestra propuesta parte de la
idea de crear una serie de módulos "patrones"
dando vida a un bloque urbano "genérico"
que descargue a la arquitectura de su función
organizativa regidora para pasar a un plano de soporte
para la representación
de posibilidades vitales, de maneras de vivir.
De este
modo, se pretende la máxima absorción de
la mencionada multiplicidad cultural con el máximo
número de usos asimilables. Un programa
de usos flexible y multirrepresentable con un entorno
acorde
a su complejidad y mixtificación dentro de las
estructuras urbanas.
Este bloque urbano "genérico" con
códigos ordenados será mutado en múltiples
situaciones de acuerdo a las condiciones existentes. Mediante un cálculo de superficies, alturas, ocupaciones,
y la superposición de usos en planta, aparece
la construcción del volumen genérico. Este
volumen se transforma mediante las condiciones de entorno,
que se introducen como valores de instalación
de dicha construcción en la realidad del paisaje
construido.
Los materiales del lugar serán localizados en
las fachadas como respuesta a condiciones de orientación,
clima y sustentabilidad.
La propuesta arquitectónica se vincula directamente
con la propuesta urbana, ya que se pensaron como una
totalidad, que se retroalimentan constantemente, de modo
que al modificarse alguna variable de la propuesta urbana,
se modifica instantáneamente la propuesta arquitectónica,
y viceversa.
Los módulos de las viviendas son genéricos,
definen actividades, usos, y no dimensiones, ni formas,
de manera que se pueden combinar entre ellos
obteniendo así, infinitas posibilidades de viviendas
sustentables. A su vez, estos módulos definen una trama urbana y las dimensiones de los lotes y de los anchos que separan
las vías de comunicación verticales. Una
trama urbana poco ortodoxa por su condición de
irregularidad.
Lo sustentable, importante para el concurso según
decían las bases, se pensó de manera mixta,
sin dejar afuera ninguna opción que aportara soluciones
a resolver la problemática. De este modo se definió un
sistema de cubiertas verdes que no sólo
eran óptimas térmicamente para el clima
de Galápagos
sino que además reducían la contaminación,
acumulaban agua de lluvia, y le otorgaba un espacio más
de cultivo a la población agricultora. Un sistema
de reciclado de agua, un sistema de
reciclado de desechos orgánicos para la producción de biogás,
la utilización de materiales autóctonos
y reciclables cerraban el panorama de lo sustentable.
Láminas
[1] Urbanismo a la carta
[2] Urbanismo a la carta
[3] Vivienda a la carta
[4] Vivienda a la carta
Realice click sobre las láminas para
ampliarlas.
Imágenes
[1] Equipo ganador y docentes
[2] Proy. urbanismo a la carta
[3] Proy. vivienda a la carta
[4] Puerto Baquerizo
Moreno
[5] Puerto Baquerizo Moreno
[6] Playa Carola, Galápagos |