Espacio Nº 47
Loft para dos
María Beatriz González Zuelgaray
Arquitecta
En el momento de encarar una obra el principal objetivo
es brindar al usuario un espacio propio, que resista
el test del tiempo y lo invite a disfrutarlo en el
momento actual y por mucho tiempo más, teniendo
siempre el confort en mente, y priorizando la armonía
y el diseño contemporáneo.
En este caso
la idea rectora fue lograr una continuidad desde
lo espacial y lo visual de zonas definidas en
si mismas como estar, comedor, cocina y dormitorio.
Se usaron blancos, negros y neutros como base para
un azul (Mar Indigo de Alba)
en cielorraso y pared divisoria cocina/dormitorio,
y un toque magenta en la banqueta de pie de cama.
Los
blancos, dados por la biblioteca/mueble de cocina
(Battista) que integra
ambos espacios, los tapizados del comedor (La Compañía
del Comercio) y la colcha del dormitorio.
Los negros,
por una gran mesa de comedor de 3. metros de longitud
laqueada semimate (Prototype), por la
mesada de granito negro Leather (Destefano), los
muebles de cocina (Battista) y el equipamiento del
dormitorio
(Prototype).
Los neutros, por el sofá y la
banqueta del estar (Prototype) tapizados en pana de algodón
color Taupe (De Levie), y en las paredes color Gris
Pardal y Gris Fósil (Alba).
Todas las ventanas, existentes, fueron vestidas con
cortinas roller de gasa blanca con faldón superior
(Rielamericano), y se colocaron cortinas pesadas delimitando
espacios.
La moquete se diseñó con base cruda
y rayas Gris Tweed (taco Alba) de 30 cm de ancho con
la idea de reforzar el confort y la integración
de zonas.
El arte está presente en el living en dos grandes
acuarelas de Martín Reyna, en los dibujos
en tinta y grafito de Angeles Gollan y en la escultura
de Irene von Lypka.
En el dormitorio dominan la pared azul los dibujos
en tinta de
Angeles González Zuelgaray.
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