Realmente… ¿necesitamos un arquitecto?

Como influyen los nuevos programas televisivos apuntados al diseño arquitectónico de viviendas en la población general y en sus deseos de renovar y mejorar sus hogares.

Por Arq. German Campagnolo. Con la gran difusión de programas televisivos, entrevistas, tutoriales y Realities referidos a la construcción y renovación de viviendas y locales comerciales, la población en general ha ganado mucho conocimiento de aspectos que antes no eran tenidos en cuenta o no se los priorizaba, ya no solo se instruye a la población de manera comercial, tratando de venderle una nueva alfombra o cortinado de gran tendencia en Europa, sino, y bienvenido que así sea, se lo está dotando de herramientas que le permiten diseñar su hábitat de manera que el desarrollo de las actividades que allí se realizan, logren llevarse a cabo de la manera eficiente y saludable. Es aquí donde nos preguntamos… ¿realmente necesito un arquitecto?

Programas actuales dedicados al diseño y renovaciones de hogares
Las formas en que nos desenvolvemos en nuestros hogares han cambiado sistemáticamente a lo largo de los años, apoyado tanto por las nuevas tecnologías como por cambios en las actividades cotidianas de los seres humanos. Antes, por ejemplo, había una marcada distribución que nucleaba los servicios lo más aislados posible del resto del hogar, baños y cocinas aparecían al fondo del lote y conectados por galerías semicubiertas que garantizaban las renovaciones de aire alrededor de ellos, algo totalmente impensado al día de hoy, donde una vivienda de categoría, tiene como eje central el baño en suite y la cocina de «concepto abierto» (más tarde nos ocuparemos de esto).

Esta instrucción que realizan los nuevos programas, tienen varios puntos para analizar. Por un lado, como dijimos anteriormente, es muy positivo que se estén priorizando temas como la espacialidad, el asoleamiento, la ventilación, las visuales, la adecuada circulación, por sobre los colores, las texturas, el mobiliario, el equipamiento, etc, sin esto resuelto, todo lo demás no se luce o es disfuncional, como dice el dicho «aunque la mona se vista de seda, mona queda». Ahora bien, esta divulgación la consideramos «un arma de doble filo» ya que si bien el común de la población ya no va a gastar sus ahorros en un ostentoso sillón Luis XV para su sala, sino que lo va a invertir en mejorar la espacialidad de su casa, es muy importante que cuente con la ayuda de un experto, y no solo porque va a potenciar las ideas que tiene para su hogar, sino que le garantizara la seguridad estructural del mismo a la hora de dirigir las mejoras.

Como mencionamos anteriormente, el famoso «concepto abierto», es una especie de trofeo que todos quieren ganar, lamentablemente, este trofeo es en su gran mayoría, sobre todo en viviendas con más de dos o tres décadas, es difícil y costoso de conseguir (no imposible), ya que no podemos derribar sistemáticamente muros portantes, columnas u otros elementos estructurales, una vez que comenzamos la ejecución ya no hay vuelta atrás, es por eso que un profesional de la arquitectura podrá resolver todas las complejidades que tenga el proyecto a fin de conseguir la renovación de su hogar. Asimismo podrá evaluar la parte financiera de su proyecto, estimando tiempos, costos, calidades, cantidad y tipos de materiales y recién ahí con toda la información podrá decidir si quiere realizar la obra.

La autoconstrucción trae innumerables sucesos inesperados en su que terminaran por paralizar la obra por falta de recursos, accidentes o daños mayores a la propiedad.

Entendemos que un obrero de la construcción es una pieza muy importante en la cadena de ejecución de la obra, por sobre él hay un personaje que le dio una tarea para que ejecute, cuando el personaje que solicita dicha tarea no tiene conocimiento de lo que pidió, seguramente el resultado no será el que imagino. Por todo esto, e innumerables ejemplos más podemos decir que Si, realmente necesitara un arquitecto.

Imagenes provistas por el autor de la nota.