Por Juan Pablo Rudoni, Presidente de Ecosan SA. El impacto de Covid-19 ha sacudido distintas industrias, organizaciones y a las personas. En este contexto, es más necesario aprender a adaptarnos a la nueva realidad, sobre todo en sectores tradicionales dentro del cual nos movemos, donde las cosas cambiaban a un ritmo más lento. Sin embargo, hoy nos encontramos enfrentando los desafíos y buscando las posibilidades de aprovechar las oportunidades para transformarnos acorde nos los pide la nueva realidad.
Todos vimos afectada nuestra vida cotidiana, nos vimos llevados a implementar tecnologías que no usábamos hasta marzo de este año, y vernos forzados a aprender a manejarnos en un nuevo contexto no fue opcional. Pero, también es cierto que muchas están saliendo fortalecidas por su capacidad operativa y su adaptación a las circunstancias.
¿Qué pasa con la construcción?
La transformación digital está mostrando una foto del sector, y obliga a las PyMEs a que actualicen sus mandos medios y operarios hacia la mejora de los procesos. A su vez, los desarrollos en materia de seguridad, ahorro de energía y materiales innovadores que están ocurriendo a nivel mundial en el sector, tracciona a las PyMEs locales con miras a satisfacer al mercado que actualmente responde a nuevos requerimientos y necesidades en la optimización de los tiempos.
Uno de los sectores que más está sufriendo el impacto de esta nueva realidad en medio del contexto país, es el de la construcción tradicional, ya sea por los lentos procesos propios de la industria, como por la burocracia endémica. Y para poder adaptarse a este nuevo contexto es necesaria cierta celeridad en la gestión, así como en la forma de producir, y en el uso de nuevas tecnologías aplicadas a nuestro sector.
Es por esto que estoy convencido que la construcción modular va a tener su auge a futuro. De hecho, esta pandemia dejó en evidencia los cambios enormes en materia de construcción al requerir proyectos a contra reloj, con sistemas que permiten acelerar la forma de implementación.
Además, cabe destacar el problema de volver a la actividad y el distanciamiento social en el sector y el traslado de trabajadores. Se necesita implementar un protocolo de seguridad y sanidad para que puedan volver a la actividad de forma paulatina.
Creo que en material de construcción modular, a futuro, va a cubrir muchas necesidades y se va a considerar y tener en cuenta como otra forma de resolver y dar soluciones de forma rápida, de calidad y sin costos adicionales. Se puede responder a las exigencias actuales y estar a la altura de los objetivos presentando soluciones a las personas.
De cara al futuro
Lo que demostró la emergencia sanitaria por la pandemia es que la construcción modular está a la altura de responder frente a las adversidades y que es un sector versátil, donde los tiempos de producción se acortan. Si bien es cierto que estamos frente a un contexto de incertidumbre, también es cierto que trae desafíos para poder innovar y ser creativos.
Acerca del autor de la nota
Juan Pablo Rudoni
Presidente de Ecosan SA
http://www.ecosan.com.ar/