Vivienda unifamiliar en La Pereda (Mieres, Asturias, España) por Zwei Estudio Creativo. Una pareja joven y una parcela privilegiada en pleno núcleo rural marcan los puntos de partida de este proyecto.
El inicio de este proyecto pasa por un análisis complejo del entorno, empezando por el afectado directamente por la normativa urbanística y avanzando posteriormente hacia el entorno circundante, del que se valoran ciertas singularidades.
Este análisis hace que se replanteen las limitaciones existentes en la normativa vigente, de carácter conservador y que condiciona totalmente la forma final de la vivienda.
Por eso, una primera decisión de proyecto fue «poner en cuarentena» diversas consideraciones de la normativa que no parecían tener en cuenta el lugar. Más bien sus restricciones parecían dar paso a un «no lugar», formulando respuestas basadas en el pasado para el entorno presente que, al tiempo, se vuelve vacío y falto de la identidad, una identidad que, sin embargo, sí se reconoce en el entorno próximo no edificado.
A este punto de partida se unen diversas consideraciones a las que el propio lugar va dando respuesta: orientaciones, relaciones con el entorno próximo a través de la vinculación de espacios, la relación con el entorno más alejado, integrando aportaciones paisajísticas proporcionadas por el valle mediante su inclusión como reflejos en fachada.
Con una sencilla composición de rotundos volúmenes, de llenos y vacíos, de transparencias y paños ciegos, de secuencias y ritmos de fachada, de reflejos y contrastes, la vivienda va respondiendo sensiblemente al emplazamiento con una identidad y personalidad propia y acorde al lugar al que pertenece.
Paralelamente, la necesidad de eficiencia energética y sostenibilidad se desmarca como otro de los puntos fuertes del proyecto, tratando ir un paso por delante de la normativa actual.
De nuevo limitados por afecciones legales, se desecha la seriación, prefabricación o industrialización, utilizando recursos proporcionados por el entorno próximo y por el propio diseño de los espacios.
La línea de desarrollo considera un proyecto que optimiza los recursos bioclimáticos/pasivos y que es capaz de articularse con claridad en la trama existente, organizando formalmente la edificación en volúmenes que agrupan funciones atendiendo a su uso.
Respuesta energética activa (exigencias normativas del CTE)
– CTE DB HE. Contribución (solar) mínima de ACS (apartado HE4).
50% si el apoyo es electricidad
30% si el apoyo es otro (gas natural, propano, gasoleo)
– Proyecto. Energía renovable utilizada: captación + bomba geotérmica.
Cubriendo el 100% de la demanda energética para ACS, calefacción (por suelo radiante) y refrigeración (por suelo refrescante).
Respuestas energéticas pasivas
Se constituye como punto fuerte de partida y desarrollo del proyecto. Desde este punto de vista, se diseña una vivienda que sea capaz de regularse térmicamente, siendo capaz de acumular calor en invierno y disiparlo en verano, a través de la utilización de distintos recursos y sistemas de acondicionamiento pasivo, debiendo llegar al confort térmico consumiendo el mínimo de energía posible.
Datos de partida
– Emplazamiento: La Pereda, Mieres.
– Estación problemática: invierno
A partir de estos datos iniciales se comienza a investigar y evaluar estrategias en las que el diseño de la vivienda sea capaz de aprovechar al máximo el clima y las condiciones del entorno, jugando exclusivamente con los elementos arquitectónicos a nuestro alcance y el sentido común.
Estrategias bioclimáticas Invierno
Interesa captar cuanta más energía mejor porque es fuente de climatización en invierno.
– Forma del edificio: influye en las pérdidas y ganancias caloríficas. Se desarrolla sobre la parcela una arquitectura compacta y alargada, es decir, de planta rectangular, cuyo lado mayor se adapta en lo posible a un eje de orientación este-oeste, orientación en la cual se encontrarán la mayor parte de los dispositivos de captación (en fachada sur/suroeste).
– Captación solar pasiva: o lo que es lo mismo, el aprovechamiento del «efecto invernadero». La fachada sur se proyecta como una superficie de captación solar directa, abriendo grandes acristalamientos, donde el vidrio no deja escapar la radiación infrarroja emitida, quedando confinada en el recinto interior de la vivienda y calentando elementos arquitectónicos de la vivienda.
Se definen elementos en la vivienda que se colocan estratégicamente a fin de reinterpretar el «muro trombe» tradicional; calentados por esa energía solar confinada, pueden almacenar el calor y liberarlo, posteriormente, atendiendo a un retardo que depende de su inercia térmica.
– Captación + acumulación + transmisión: los cerramientos del resto de orientaciones se diseñan con una gran inercia térmica de manera que funcionen como tradicionalmente lo ha hecho: capaces de captar la máxima radiación solar posible (superficie de color oscuro: pizarra negra en taco), acumular la energía captada en su interior (masa o inercia térmica) para finalmente cederla al ambiente interior.
– Efecto climático del subsuelo: aprovechamiento del efecto climático del subsuelo (su capacidad de acumulación calorífica) a través del semi-enterramiento de la planta sótano, ya que consigue amortiguar y retardar la variación de temperatura que se produce entre el día y la noche, con el consiguiente efecto sobre las plantas superiores.
Medidas correctoras
Verano
– Protección acristalamientos sur: se dispone de sistemas de protección, tanto fijos como móviles, (celosías exteriores en madera) para la protección de los acristalamientos sur de la radiación solar en verano.
– Ventilaciones cruzadas: el posible exceso de acumulación de calor interior en verano se puede disipar a través de la ventilación. Para ello, se diseña un sistema de ventilaciones cruzadas que tiene en cuenta el desarrollo integral de la vivienda.
– Suelo refrescante: se incluye como medida correctora bioclimática el suelo refrescante al provenir de una energía alternativa como es la captación geotérmica y la bomba de calor.
Elección de materiales
En cuanto a la elección de materiales, se han diferenciado los materiales de la estructura del resto de materiales. Así, ha primado de manera decisiva la proximidad de las fuentes de obtención por un lado y la posibilidad de reutilización futura por otro. De ahí que, en primer lugar se haya optado por muros y forjados de hormigón, pues la central que lo produce y suministra se encuentra a escasos 2 kilómetros (4 minutos desde la salida a la llegada a la obra), lo que ha resultado una decisión fundamental de cara a resolver estructuralmente los puntos fuertes del proyecto. Se tiene en cuenta también que el proyecto se encuentra en zona siderúrgica, por lo que tanto el acero para armar como los perfiles de acero estructural se consideran de producción local.
Por otro lado, se opta por una estructura más liviana de pilares metálicos, no sólo por cuestiones relativos a la proximidad u otras cuestiones estéticas (se encuentran embutidos en los cerramientos proyectados), sino debido a que se deja abierta la posibilidad de posterior reutilización de los mismos. De cara a la elección de los materiales de revestimiento ha primado claramente su posibilidad de futuras reutilizaciones, colocando piedra en taco en la parte de los volúmenes exteriores por un lado y madera por otro.
Aunque en el proyecto la madera prescrita era de pino tratada, finalmente ésta se ha sustituido por madera de ipé, modificación motivada fundamentalmente por la necesidad de controlar el coste final de mantenimiento de la vivienda.
Respuestas constructivas
Dos aspectos constructivos finales. De una parte, resaltar la existencia de materiales reutilizados y reciclados, como son las traviesas de tren en madera de castaño reconvertidas en límites de jardineras y/o firmes de piso puntuales en el acceso desde la parcela a la vivienda.
De otra, y con respecto a la posibilidad de montar en obra material industrializado, normalmente de dimensiones considerables, resaltar en este proyecto concreto la premisa inicial de evitar cualquier elemento y/o proceso industrializado por tres motivos fundamentales:
1- La industrialización en la parte estructural no era posible al 100% ya que se proyecta un semisótano cuya estructura se decide llevar a cabo en hormigón armado, dada la cercanía de la central.
2- Por otro lado, los accesos, excesivamente pequeños (ancho de acceso de 3 metros o incluso menor en algunos tramos) y la reducida parcela con la que se cuenta, no hacen viables soluciones industrializadas ni colocación de grandes paneles. Se hace imposible el traslado y colocación del material en obra sin encarecer el coste final.
3- Finalmente, la normativa que rige en la zona prohíbe cualquier material de revestimiento que presente al exterior un carácter industrializado (sólo se admitían revestimientos continuos, de piedra o madera).
Acerca de los proyectistas
zwei|estudiocreativo esta compuesto por Andrea Fernández y Talía Fernández, arquitectas formadas en la Escuela Técnica Superior de La Coruña (ETSAC). Ambas arquitectas y, en la actualidad, doctorandos ligadas al departamento de Construcciones Arquitectónicas, habiendo obtenido el Diploma de Estudios Avanzados (DEA) y la Suficiencia Investigadora en el programa de doctorado Patología y Restauración Arquitectónica en el año 2009.
Desde 2010 también forman parte del grupo de investigación reconocido por la Universidad de La Coruña Sistemas Constructivos y Rehabilitación (SICOR). Además de los proyectos de investigación realizados para el departamento de Construcciones Arquitectónicas, ambas han participado activamente en otros proyectos de investigación del Departamento de Proyectos Arquitectónicos y Urbanismo dentro de la misma Escuela Técnica Superior de Arquitectura de La Coruña. En la actualidad, amas arquitectas desarrollan sus respectivas Tesis Doctorales, cuyas palabras clave son sostenibilidad, eficiencia energética e impacto medioambiental.
En el plano profesional, las colaboraciones entre las dos arquitectas comienzan en el año 2007 desarrollando diferentes proyectos arquitectónicos y concursos. Los proyectos comunes se han mantenido desde entonces hasta la creación del equipo zwei en abril de 2013, un estudio creativo concebido con el objetivo de ampliar y diversificar los proyectos comunes que traspasarán los límites arquitectónicos para protagonizar proyectos de colaboración social, investigaciones y distintas propuestas I+d+i, desarrollos ligados al diseño gráfico y organización de eventos y todo tipo de propuestas de lo más variado.
Ficha técnica
Nombre: Vivienda unifamiliar en La Pereda
Ubicación: La Vega de La Pereda, Mieres (Asturias)
Arquitectas: Talía Fernández Fernández, Andrea Fernández Fernández (equipo zwei)
Dirección de obra: Talía Fernández Fernández, Andrea Fernández Fernández (equipo zwei)
Dirección Ejecución Material: Daniel Izquierdo García, arquitecto técnico
Constructora: Construcciones y proyectos corporativos, SL (CPC)
Estudio geotécnico: Geotecnia Alperi, SL
Geotermia y suelo radiante: Asturcántabro instalaciones
Cliente/Promotor: Particular privado
Superficie construida: 522,36 m2
PEM: 214.855,20 euros
Fecha de proyecto: Julio 2009 – Abril 2010
Fecha de construcción: Agosto 2010 – Diciembre 2011
Fotografías: Javier Granda | zwei, SC
Contacto: http://www.zwei.es